Capturando

Hola, soy Pablo Béglez

Momentos

Porque...

... somos más que una historia bonita. Somos instantes, detalles, recuerdos. Somos el legado de los que vendrán.

Desde

2005

QUIERO TRANSFORMAR LOS MOMENTOS MÁS ESPECIALES DE TU GRAN DÍA EN EMOCIONES ATEMPORALES

Son precisamente esas historias las que intento capturar para la posteridad en mis reportajes de boda, de forma natural — sin alterar nada de lo que está pasando o forzando las situaciones para que ocurran. Simplemente estoy, observo, intento pasar desapercibido y fundirme dentro del contexto, retratando tanto los momentos clave como las miradas fugaces y las sonrisas de complicidad. Los detalles también son una parte esencial de esas historias — las flores, la vajilla, los accesorios, los zapatos, el seating plan, todos los rincones… Son elementos a priori pequeños pero que aportan sentido a lo grande, muchas veces cargados de significados importantes para los novios y en los cuales han invertido esfuerzo, tiempo e ilusión. Me encanta captar esos detalles cuando están acompañados de personas porque, al fin y al cabo, son ellas quienes hacen que esa imagen sea única y que esos recuerdos tengan un valor inmaterial inconmensurable.

En resumen, mi forma de entender la fotografía está intrínsecamente relacionada con mi forma de ver el mundo. Mi objetivo nunca ha sido ganar un premio — amo conectar con las personas y vivo la fotografía como una necesidad vital: la de contar las historias detrás de las imágenes y convertirlas en algo atemporal. Despojarlas de artilugios —pero no de arte o de belleza— y sobrepasar las barreras de la distancia y de la memoria, para sacar a relucir la esencia de lo que, para mí, tiene realmente valor en la vida: el amor, las experiencias y los recuerdos. El objetivo puede sonar ambicioso, pero yo soy lo opuesto de pretencioso: un tío con los pies en la tierra, espontaneo, extrovertido, alegre — a veces un puntito gamberrillo —, que disfruta tanto cogiendo olas, esquiando, viajando por el mundo o tomando cañitas con amigos, como viendo una película desparramado en el sofá. No me molan los lujos ni lo superfluo, me molan las personas, su esencia… Mi mayor privilegio es vivir de lo que más amo.

De pequeño, solía mirar fotos familiares como quien busca respuestas al sentido de la vida. Preguntar quién era quién, qué estaban haciendo, qué habían hecho luego de tomar la fotografía — y por qué no habían tomado más. Esos trozos de papel eran fragmentos de historias, de personas, que en algunos casos ya no estaban con nosotros. Eran parte de mí y de mi vida, de mis afectos y de mis orígenes — eran un tesoro invaluable. Todavía lo son.

Por eso, cuando cogí por primera vez una cámara a los quince años de edad, supe que sería una herramienta que me acompañaría para siempre y que me ayudaría a congelar en el tiempo esos momentos épicos de la vida. Tras estudiar el ciclo superior de fotografía artística de la escuela de arte de Las Palmas, decidí dar un salto en mi formación y continué con mis estudios en la prestigiosa escuela GrisArt de Barcelona.

Después de absorber lo máximo posible en todo lo referente al mundo de la fotografía, regresé a Gran Canaria para dar los primeros pasos de mi carrera profesional realizando trabajos como fotógrafo multidisciplinar (arquitectura, moda, fotografía social, estudio, etc.).

Por eso, cuando cogí por primera vez una cámara a los quince años de edad, supe que sería una herramienta que me acompañaría para siempre y que me ayudaría a congelar en el tiempo esos momentos épicos de la vida. Tras estudiar el ciclo superior de fotografía artística de la escuela de arte de Las Palmas, decidí dar un salto en mi formación y continué con mis estudios en la prestigiosa escuela GrisArt de Barcelona.

Después de absorber lo máximo posible en todo lo referente al mundo de la fotografía, regresé a Gran Canaria para dar los primeros pasos de mi carrera profesional realizando trabajos como fotógrafo multidisciplinar (arquitectura, moda, fotografía social, estudio, etc.).

Algunas de mis bodas han sido publicadas en

Nombrado uno de los "30 Rising stars of wedding photography 2016.

Testimonios

Es el mejor fotógrafo de bodas del mundo!

No sólo plasma las fotos con una calidad increíble, sino que además es un sol como persona. Para nosotros fue una pieza clave y fundamental el día de la boda, porque nos dirigió y guió hasta el final. También tuvimos la oportunidad de hacer una sesión de preboda que nos encantó. Pablo hace Magia con las fotos y gracias a él nuestro recuerdo de aquel día no puede ser más bonito :)))

Sonia & Crístian

FAQ

¿DONDE VIVES?

01.

Soy de canarias, concretamente de Las Palmas de Gran Canaria vivo aquí pero me paso todo el año viajando por el mundo para fotografiar historias como la tuya. Regresar a casa me permite disfrutar de la playa y el sol que es lo que me llena de energía.

¿CÓMO PUEDO RESERVAR MI FECHA?

02.

El primer paso es rellenar un formulario, algunas preguntas y la información más relevante de vuestro día. Con ello, redacto un pequeño acuerdo. Ambos firmamos el acuerdo y formalizar la reserva mediante el ingreso del primer pago.

¿TRABAJAS SOLO O ACOMPAÑADO?

03.

En la mayoría de los casos suelo ir solo, salvo que en vuestra boda haya más de 250 invitados o si hay que estar en dos lugares a la vez. En estos casos sí es recomendable contratar la opción del segundo fotógrafo.

¿PODEMOS CONOCERNOS ANTES DE LA BODA?

04.

Claro que sí, será genial conocer todos los detalles de vuestra boda, mi forma de trabajar y responder todas vuestras dudas. Podríamos hacer una videollamada mientras tomamos un café o una cervezita jeje. O si nos encontramos en la misma ciudad podríamos vernos en algún lugar para charlar.

¿REALIZAS BODAS FUERA DE TU CIUDAD?

05.

Por supuesto, me apasiona viajar y estaré encantado de contar vuestra historia de amor en cualquier lugar del mundo.

¿CUÁNTO TARDAS EN ENTREGAR LAS FOTOS?

06.

Entre dos y tres semanas. Los soportes físicos tardan tres semanas más desde su envío al laboratorio.